Círculo Taurino

Fundación

Si bien la primitiva idea de constituir en Córdoba una nueva asociación taurina comenzó a fraguarse en al año 1962 con motivo del centenario del nacimiento de “Guerrita”, no fue hasta el domingo 13 de octubre de 1963, y a la conclusión de una corrida goyesca que se anunciaba como el último festejo en el coso de Los Tejares (circunstancia que finalmente no sucedió hasta el año 1965) cuando un grupo de aficionados se dio cita en la taberna “Casa Villanueva”, y fundaron oficialmente el “Círculo Taurino de Córdoba”, cuyos Estatutos habían sido aprobados previamente por la Dirección General de Política Interior el 9 de agosto de 1963.

LOS SOCIOS FUNDADORES FUERON

• Presidente: D. Carlos Valverde Castilla
• D. Manuel Guerra Lozano
• D. Eduardo Sotomayor Criado
• D. Saturnino Ibáñez Frías
• D. Rafael del Campo Zabala
• D. Antonio Chacón Mejías
• D. José –Tomás Valverde Castilla
• D. José Bellido Romero
• D. Rafael Guerra Montilla
• D. Francisco del Campo y del Campo
• D. Rafael García Espejo
• D. José Guerra Montilla
• D. Joaquín Velasco López de Letona
• D. Antonio Jordano Barea
• D. Eleuterio Palacios de la Mata
• D. Manuel Señán Orta
• D. Rafael del Campo y del Campo
• D. Diego Medina Criado
• D. José Dorado Sampedro

Fue elegido por unanimidad como primer presidente del Círculo Taurino de Córdoba D. Carlos Valverde Castilla, fijándose el domicilio social en la calle Azonaicas, iniciándose ya las gestiones para dotar a la nueva asociación de un local en el que desarrollar el fin social, y que no era otro que fomentar la afición a las fiestas de toros y velar por su integridad y pureza.

Fiel reflejo del espíritu que siempre ha presidido el Círculo Taurino cordobés son las declaraciones al diario ABC de su primer presidente al momento de fundarse la asociación, y en las que destacaba que “no se trata de una peña más, de las que tienen como fin ensalzar las glorias de un torero determinado. El Círculo Taurino de Córdoba quiere agrupar a los aficionados de todas procedencias y partidismos; mas como pretende conservar a todo trance su libertad de criterio y opinión, ha fijado en sus estatutos la prohibición de que pertenezcan al mismo, como socios numerarios, todos aquellos que profesional o económicamente se encuentren ligados al mundo de la torería.”